Memoria de san Joaquín y santa Ana

Memoria de san Joaquín y santa Ana, padres de la Inmaculada Virgen María, Madre de Dios, cuyos nombres se conservaron gracias a tradición de los cristianos.

No conocemos por los Evangelios a Ana y Joaquín, los padres de la Madre de Dios, sino sólo por ciertas tradiciones que se pueden remontar hasta la primera mitad del siglo II. El padre la madre de María constituyen el eslabón que une el antiguo Israel con el nuevo: Recibieron la bendición del Señor» y por ellos nos llega «la salvación prometida a todos los pueblos».

Dieron el ser a aquélla de la que había de nacer el Hijo único de Dios. De ahí que San Juan Damasceno les pueda saludar en estos términos: «Joaquín y Ana, ¡feliz pareja! la creación entera os es deudora; por vosotros ofreció ella al Creador el don más excelente entre todos los dones: una madre venerable, la única digna de Aquel que la creó».

El culto de Santa Ana ha crecido junto con la irradiación del de María. En Jerusalén, en la basílica de «Santa María, donde ella nació», conmemoraba Juan Damasceno, en el siglo VIII, a los abuelos de Jesús. Del modo más natural dicha basílica se convertiría en la iglesia de Santa Ana de los Cruzados. Pero, ya desde el siglo VI, se honraba a Santa Ana en Constantinopla, en una basílica que fue dedicada en su honor un 25 de julio. El culto de San Joaquín pasó mucho más tarde a unirse al de su esposa.

Hice una promesa a la Virgen…y estoy viajando ya ..

Estaba muy preocupada por un tema y como se ha solucionado después de mucha oración, le prometí ir a Medgujorge a ponerme a sus pies, aunque también está cada día en el sagrario..pero las promesas hay que cumplirlas y eso que me da mucha pena siempre dejar a mi familia.

Cariños para todos; siento que ya no soy constante en los diarios, pero prefiero hacerlo con devoción y no con obligación.

Pues bien, escribí así el 5 de Abril de 2018 y estaré viajando el sábado 22 muy pronto. Os encomiendo a todos.