¡NO RECIBAS LA EUCARISTIA EN LA MANO!
En Buenos Aires, Argentina se ha puesto de moda el recibir la Eucaristía en la mano (la obra sacrílega de satanás), y a una persona que recibió la eucaristía ...
¡NO RECIBAS LA EUCARISTIA EN LA MANO!
En Buenos Aires, Argentina se ha puesto de moda el recibir la Eucaristía en la mano (la obra sacrílega de satanás), y a una persona que recibió la eucaristía en la mano se le cae la Hostia Consagrada al suelo y no la quiere tomar porque decía que estaba sucia, y se rehusó a tomar esa eucaristía del suelo. Otra persona más piadosa la colocó a un lado con más cuidado y le avisó al sacerdote lo ocurrido.
El sacerdote siguió el procedimiento para estos casos y colocó la Hostia en un recipiente con agua para que se disuelva, para luego echar dicha agua en una planta (como es el procedimiento a seguir), y la coloca dentro del Sagrario. Pasado un tiempo abre el Sagrario para desechar dicha agua donde se debía haber disuelto la Hostia y lo que vió fue que la Hostia no se disolvió sino que tenía manchas rojas de diversos tamaños.
Cuando dichas manchas rojas se llevan a un laboratorio para ser analizadas, el laboratorista confirma que contienen sangre humana del tipo AB, y que el tejido que se le ha entregado (era un pedazo de Hostia) corresponde a tejidos del miocardio de un corazón humano; pero lo que más sorprendió al laboratorista fue que el tejido humano latía, las células humanas seguían vivas (a pesar que todo científico sabe que los glóbulos rojos empiezan a morir a los 5 minutos de la muerte del ser humano).
Esta es la historia del milagro eucarístico de Buenos Aires.