Para el Padre Pío ( ayer fue su fiesta, días en que falleció) la fe era la vida: quería y hacía todo a la luz de la fe. Estuvo dedicado asiduamente a la oración. Pasaba el día y gran parte de la noche en coloquio con Dios. Decía: “En los libros buscamos a Dios, en la oración lo encontramos. La oración es la llave que abre el corazón de Dios”. La fe lo llevó siempre a la aceptación de la voluntad misteriosa de Dios.
Un gran santo que tuvo una vida llena de sufrimientos y entrega a Dios,. decía también, «Las oraciones de los santos en el cielo y las de los justos en la tierra, son perfume que no se perderá jamás».
Le tengo gran cariño y devoción !!!!
Tengo el regalo que nació en su día mi hijo Daniel al que encomiendo mucho.