El 14 de junio de 1981, domingo de la Santísima Trinidad, se iniciaron las denominadas «apariciones de El Escorial». Luz Amparo Cuevas fue la persona agraciada por esta revelación mariana en la finca de «Prado Nuevo» en El Escorial (Madrid). A esta fecha tan significativa, precedieron algunas manifestaciones previas del Señor y de la Virgen, desde noviembre de 1980.
Aquel día (14-6-1981), testimonia Luz Amparo que pudo contemplar a la Virgen de los Dolores sobre un fresno, que a partir de entonces se convierte en el centro de reunión de multitud de personas, a lo largo de los años, para orar con especial devoción, sobre todo la plegaria predilecta de María: el Rosario.
Nuestra Señora le pidió que se construyera allí una capilla en su honor para meditar la Pasión de su Hijo «que está completamente olvidada». Y añadió: «Si hacen lo que yo digo, habrá curaciones. Este agua curará (se refiere a la que mana de la fuente que allí se encuentra). Todo el que venga a rezar aquí diariamente el santo Rosario, será bendecido por mí. Muchos serán marcados con una cruz en la frente. Haced penitencia. Haced oración».
Bonito y prometedor este primer mensaje de la Virgen a Luz Amparo, correspondamos con nuestras visitas y oraciones, para que todo ello se cumpla, y vivamos cada vez con más amor hacia la Stma.. Virgen, nuestra Madre.