Nada me puede gustar más..y me cuesta mucho cada domingo porque mis hijos ya están desperdigados..me consuela vivirla con mi esposo y unirnos en el amor a Dios, a quien pido cada día por la fe de los cinco y para que nos conserve unidos en Su amor .
Nada me puede gustar más..y me cuesta mucho cada domingo porque mis hijos ya están desperdigados..me consuela vivirla con mi esposo y unirnos en el amor a Dios, a quien pido cada día por la fe de los cinco y para que nos conserve unidos en Su amor .
El cumplir la obligación dominical de la misa juntos en familia, es una cosa muy bonita que hace vivir mas la unión en una familia cristiana,, si bien este objetivo muchas veces por diversa circunstancias no se pueden cumplir como tu mencionas.
La Eucaristía dominical en familia la vivo como familia unida en Dios. Pero a medida que los hijos han ido creciendo se hace muy difícil. Al final asistimos el sábado por la tarde con un hijo y el domingo con el otro.