Lleno de alegrías, gozos, regalos, amores y alguna que otra pena.
Por mi parte, agradezco haber peregrinado dos veces a Medgujorge y sentir plenamente obrar a La Reina de la Paz y también hacerlo a Tierra Santa, donde he reafirmado mi compromiso de vida de la mano de Jesús, para alivianarle el peso de su cruz.
Gracias, gracias.
Os quiero y abrazo en el amor de Jesús y de María .
Si muchas gracias tenemos que dar a Dios, por tantas cosas como nos ha dado este año, primero la vida, y después pues todas las alegrías, penas o sufrimientos que nos ha podido dar, , todo ha sido ofrecido para darle gloria y cumplir su voluntad