Escribo después de Adoración Nocturna en Caná.
Me gusta mucho que el Niño Jesús siga presente en las Iglesias y hogares..que no lo retiren..que quede todo el año ¡¡
El mío queda todo el año en mi taller..las personas que vienen a ver Verili, lo ven y respetan.
Esta noche estaba en su cuna..ayer por la mañana le vi en un Portal de Belén al exterior y estaba tapado con su sábana..este detalle me llenó de su amor, irradiado en las personas que le adorábamos.
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Estos días de navidad en Bariloche he vivido grandes encuentros con el Padre Pancho Peña, quien junto a Dios por encima de todo , es el origen de esta movilización juvenil.
Una vez terminadas las fiestas navideñas, ya nos preparamos para la Semana Santa, que este año llega muy pronto.
He recibido un regalo bellísimo de Navidad: un individual de hilo bordado a mano por unas monjitas que quiero mucho.El de la foto es un cuadro de un museo argentino..pero el regalo es mucho más exquisito.
Siento su amor en cada puntada y por encima de todo, el de la mujer que las enseñó a coser.
Los regalos que se hacen con amor son los mejores; delicados a la hora de prepararlos, desde el principio hasta el remate y planchado final.
Me gusta lo que ocupa poco y es útil.
Servirá para mucho y otros disfrutarán viéndolo.
Lo luciré como he aprendido, a dar siempre lo mejor..como si sirviera a Dios.
Me gustó escuchar en la homilía de ayer que los Reyes Magos vieron la estrella porque se ¨habían puesto en camino»..así es que tenemos que ser decididos y no quedarnos a esperar a ver a Dios..El es universal y nos espera a la vuelta de la esquina..y cuando le conocemos..que sepamos ser estrella para otros.