Calentando con su aliento el portal.
Importantes también para imaginar el bendito portal.
A Dios no se le escapó ni un detalle..
Calentando con su aliento el portal.
Importantes también para imaginar el bendito portal.
A Dios no se le escapó ni un detalle..
Al Niño Dios recien nacido no le podía faltar el calor, aparte del que le daban sus padres,se acondicionó de otro tan sencillo y natural como el de la mula y el buey.
Me emociona El ver cómo Dios se ocupa de todo los detalles para los que se abandonan en sus manos.
su Hijo amado no podía pasar frío. Y así de forma tan humilde y sin lujos tuvo lo .necesario