Rezamos por usted .
ÉL personalmente me dijo hace menos de un mes que «le sostiene la oración» y que la fuerza y la paz le vienen del Dios y de la Virgen Santísima.
Un año hoy de su elección.
No ha descansado más que medio día por fiebre..cuídese que le necesitamos.
Gracias al Espíritu Santo y al Santo Padre por el giro en la Iglesia y por las nuevas almas que se acercaron a Dios +
Alabado seas Señor.
Así cada día , sin parar de agradecer tanto.
Vivo repitiendo el título de hoy..a veces tengo que controlar porque me sale en cualquier lugar y a veces hay que ser cauteloso..tengo que aprender a medir a veces mis palabras porque no es conveniente las perlas a quienes no las valorarán.
Nos unimos todos en oración y alabanza a Dios; en la comunidad de Palpita la Vida que sólo pretende que sea un lugar de hermandad donde hablar y compartir el amor a Dios y a la Virgen Santísima +
Meditando sobre las santas del viernes día 7 de marzo..santa felicidad y santa perpetua..me conmueve leer la firmeza de los santos ante tanta prueba..
Luego llamaron a Perpetua. El juez le rogaba que dejara la religión de Cristo y que se pasara a la religión pagana y que así salvaría su vida. Y le recordaba que ella era una mujer muy joven y de familia rica. Pero Perpetua proclamó que estaba resuelta a ser fiel hasta la muerte, a la religión de Cristo Jesús. Entonces llegó su padre (el único de la familia que no era cristiano) y de rodillas le rogaba y le suplicaba que no persistiera en llamarse cristiana. Que aceptara la religión del emperador. Que lo hiciera por amor a su padre y a su hijito. Ella se conmovía intensamente pero terminó diciéndole: ¿Padre, cómo se llama esa vasija que hay ahí en frente? «Una bandeja», respondió él. Pues bien: «A esa vasija hay que llamarla bandeja, y no pocillo ni cuchara, porque es una bandeja. Y yo que soy cristiana, no me puedo llamar pagana, ni de ninguna otra religión, porque soy cristiana y lo quiero ser para siempre».
Hoy, 9 de marzo, conmemoramos a 
, Adolescente.
SANTO DOMINGO SAVIO (1842-1857) nació en Riva de Chieri, Italia, en el seno de una familia humilde y muy devota.
Desde su tierna infancia mostró un comportamiento muy santo. Casi desde que aprendió a hablar se fijó su propósito en la vida: ser un verdadero cristiano.
En 1849 hace su primera comunión. Fue un día trascendental en su vida, y ahí escribió cuatro sencillos propósitos que normaron su camino a la santidad.
En 1854 conoce a Don Bosco, quien de inmediato percibe las virtudes cristianas del niño. Se convierte en un padre y amigo, y se lo lleva consigo a Turín, a vivir entre los niños pobres que Don Bosco recibía en su Oratorio.
Domingo se muestra siempre atento a las necesidades del prójimo. Sereno y alegre, transmitía el catecismo a sus compañeros, ayudaba a los enfermos y detenía los pleitos que se suscitaban entre los muchachos. También fue víctima de acusaciones injustas, que sufrió con resignación, emulando a Jesús.
Delicado de salud, y tal vez por permanecer rezando en la capilla en invierno hasta altas horas de la noche, enferma gravemente. Al sentir la muerte, un mes antes de cumplir 15 años, Domingo se despide de sus compañeros con estas palabras: “¡Adiós, nos veremos en el Paraíso!”
El papa Pío XII lo canonizó en 1954. Santo Domingo Savio es el santo patrono de los monaguillos, de los niños cantores y de las mujeres embarazadas.
SANTO DOMINGO SAVIO nos enseña que el ideal cristiano se puede alcanzar a una edad muy tierna.