Venid a este santo lugar que os extraño.
Reconozco que muchas veces soy Marta pues me preocupo y me agito.
Qué es mejor muchas o una..? Dios nos pide una y bien pero a veces llegamos a más y podemos ser luz para otros.
Felicidades a las que se llamen Marta y Beatriz.
Texto del Evangelio (Lc 10,38-42): En aquel tiempo, Jesús entró en un pueblo; y una mujer, llamada Marta, le recibió en su casa. Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su Palabra, mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres. Acercándose, pues, dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile, pues, que me ayude». Le respondió el Señor: «Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada».
Era muy complicado que pudiera llegar a tiempo al Rosario nocturno del 27 en Boadilla, donde la Virgen dijo que estaría mañana, tarde y noche en un árbol; el único alcornoque entre encinas..vuelos cancelados desde Buenos Aires, cenizas del volcán que alertaban del cierre del aeropuerto..mucho retraso para saber si podríamos facturar..vuelo único que viaja a Europa, el nuestro, con destino a Madrid y llegando a casa minutos antes del encuentro de almas.Dejé todo y me fui con inmenso deseo de subir el camino de arena hasta el lugar; oración de saludo ante la cruz, donde esta noche de recogida de almas, reposan esperando al ángel que las conduce al árbol..donde la Virgen Santísima las arropa en su manto y las lleva al Cielo..camino al árbol y justo empieza la oración; ni un minuto más ni menos..cuando Ella lo quiere..lo consigue..Me postré de rodillas y recé en silencio; ni abrir los ojos podía..sentía una paz inmensa..la misma que en otros santuarios marianos..una brisa fresca y los grillos cantando..hoy nos contaron que cuando Ella da mensaje, se callan los animales y María lo hace saber a la gente que participa en la oración..es madre..en ese lugar se vive todo con humildad y sobre todo, con naturalidad; no quieren cambiar después de 23 años y sus costumbres son las de siempre..me gusta su frescura..no hay protocolo de ningún tipo.Cuando lleguen riadas de personas, habrá que poner orden..hoy fuimos 130 aprox..y hace meses eran muy pocos..cuántos frutos a tanto escapulario recibido..una cadena de amor desde las mujeres que los cosen..hoy conocí a otra señora que me contaba que la Virgen les pidió que se vieran ambas partes y es por eso que está separada la parte de detrás..raso azul como su manto y sobre todo, hecho a mano, con puntadas de amor..qué bonito testimonio..me provoca tanta ternura saber que desde Argentina les llegan oraciones y agradecimientos..yo llevo tantos testimonios de este viaje que los iré contando.. son muchos regalos al otro lado del océano..Tenía que haber añadido a la oración el testimonio impresionante de Alejandro,que falleció ayer de cáncer en Buenos Aires. Unos días atrás le pusieron el escapulario debajo de la almohada y se le reflejó la imagen de la Virgen, tal cual, con las puntadas en ambos lados del pecho..primero en el izdo y después en el derecho..en ese momento cerró los ojos y los abrió feliz y dijo a las 3 personas que estaban con él en la habitación que había estado con Dios y con la Virgen..
Estoy escribiendo en bloque..tanto os contaría..me doy cuenta del amor grande acá también pues me fui encontrando con vecinos, amigos del árbol..estaba eufórica de gozo; además del reencuentro, sentir la presencia de la Virgen me provoca de todo ..besé el árbol..lo deseaba..me hubiera abrazado pero había mucha gente esperando..muchas personas nuevas..hoy no dio mensaje pues Antonio no estaba, pero pusieron la grabación del 15 de Junio, justo cuando vinieron mis amigas argentinas..anoté a oscuras mucho, pero me tocó fuerte este mensaje del ángel: «el rebaño iba creciendo, el pastor quedó satisfecho y las ovejas se unieron..y el pastor ya no sabía cuáles eran del pequeño rebaño para convertirse en el gran rebaño que el Señor le había mandado..» Pensaba en todos vosotros..pues formáis parte del gran rebaño ya que nos unimos en el alma y hoy muchos estabais en oración a la vez. Y este trozo de mensaje que nos dio ese día la Virgen: «María no está pidiendo riqueza..con la oración comunitaria podéis detener focos de epidemia..»
Seguiría escribiéndoos pero es tardísimo..llegué a casa a las 23.30 pues se reza con extensión y devoción y después compartimos saludos y marchamos..reconozco que siempre me voy casi la última..me gustaría parar el tiempo..
Besos +
cosecharán entre canciones..
Día litúrgico: 25 de Julio
Texto del Evangelio (Mt 20,20-28): En aquel tiempo, se acercó a Jesús la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, y se postró como para pedirle algo. Él le dijo: «¿Qué quieres?». Dícele ella: «Manda que estos dos hijos míos se sienten, uno a tu derecha y otro a tu izquierda, en tu Reino». Replicó Jesús: «No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo voy a beber?». Dícenle: «Sí, podemos». Díceles: «Mi copa, sí la beberéis; pero sentarse a mi derecha o mi izquierda no es cosa mía el concederlo, sino que es para quienes está preparado por mi Padre».
Al oír esto los otros diez, se indignaron contra los dos hermanos. Mas Jesús los llamó y dijo: «Sabéis que los jefes de las naciones las dominan como señores absolutos, y los grandes las oprimen con su poder. No ha de ser así entre vosotros, sino que el que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros, será vuestro esclavo; de la misma manera que el Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos».
Comentario: Rev. D. Antoni ORIOL i Tataret (Vic, Barcelona, España)
«No sabéis lo que pedís. (…) Sentarse a mi derecha o a mi izquierda (…) es para quienes está preparado por mi Padre»
Hoy, en el fragmento del Evangelio de San Mateo encontramos múltiples enseñanzas. Me limitaré a subrayar una, la que se refiere al absoluto dominio de Dios sobre la historia: tanto la de todos los hombres en su conjunto (la humanidad), como la de todos y cada uno de los grupos humanos (en nuestro caso, por ejemplo, el grupo familiar de los Zebedeos), como la de cada persona individual. Por esto, Jesús les dice claramente: «No sabéis lo que pedís» (Mt 20,22).
Se sentarán a la derecha de Jesucristo aquellos para quienes su Padre lo haya destinado: «Sentarse a mi derecha o mi izquierda no es cosa mía el concederlo, sino que es para quienes está preparado por mi Padre» (Mt 20,23). Así de claro, tal como suena. Precisamente decimos en español: «No se mueve la hoja en el árbol sin la voluntad del Señor». Y así es porque Dios es Dios. Digámoslo también a la inversa: si no fuera así, Dios no sería Dios.
Ante este hecho, que se sobrepone ineludiblemente a todo condicionamiento humano, a los hombres sólo nos queda, en un principio, la aceptación y la adoración (porque Dios se nos ha revelado como el Absoluto); la confianza y el amor mientras caminamos (porque Dios se nos ha revelado, a la vez, como Padre); y al final… al final, lo más grande y definitivo: sentarnos junto a Jesús (a su derecha o a su izquierda, cuestión secundaria en último término).
El enigma de la elección y la predestinación divinas sólo se resuelve, por nuestra parte, con la confianza. Vale más un miligramo de confianza depositada en el corazón de Dios que todo el peso del universo presionando sobre nuestro pobre platillo de la balanza. De hecho, «Santiago vivió poco tiempo, pues ya en un principio le movía un gran ardor: despreció todas las cosas humanas y ascendió a una cima tan inefable que murió inmediatamente» (San Juan Crisóstomo).